viernes, 12 de febrero de 2010
- Chuck, ¿has terminado de intentar destrozarme la noche?
- Mira, nunca debí haberte abandonado. Supe que había tomado la decisión equivocada en cuanto aterrizó el avión. Me distraje todo el verano. Esperando no sentir esto más, pero todavía lo siento.
- ¿Y?
- Estaba asustado... asustado de que si pasábamos todo el verano juntos, sólo nosotros... vieras..
- ¿Ver qué?
- A mí.
- Por favor no te vayas con él.
- ¿Por qué? Dame una razón y "soy Chuck Bass" no cuenta.
- Porque tú no quieres.
- No es suficiente, "que yo no quiera" no es bastante.
- ¿Qué más quieres?
- La verdadera razón por la que debería quedarme aquí y no meterme en el coche. Tres palabras. Ocho letras. Sí, soy toda tuya.
- Yo...Yo...
- Gracias. Es todo lo que necesitaba oír.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario